Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

II Macabeos 6, 29-31

29 Los que le llevaban cambiaron su suavidad de poco antes en
dureza, después de oír las referidas palabras que ellos consideraban
una
locura;

30 él, por su parte, a punto ya de morir por los golpes, dijo
entre
suspiros: «El Señor, que posee la ciencia santa, sabe bien que,
pudiendo
librarme de la muerte, soporto flagelado en mi cuerpo recios dolores, pero
en mi alma los sufro con gusto por temor de él.»

31 De este modo llegó a su tránsito. (No sólo a los jóvenes, sino
también a la gran mayoría de la nación, Eleazar dejó su muerte como
ejemplo de nobleza y recuerdo de virtud.)